MÁS PALABRERÍA CONTRA EL HAMBRE
El Mundo. 16/11/09. Roma
Empieza con un dolor en el estómago que se convierte en permanente y al que se añade un cansancio infinito, que convierte estudiar, trabajar o jugar en tareas extremadamente arduas. El organismo comienza a consumir su grasa y sus tejidos. La piel se hace tenue, tiesa, pálida y fría. El cabello se seca y se cae. Después de entre 8 y 12 semanas sin alimentos, se muere.
Un total de 1.020 millones de personas (un 15% de la población mundial) saben muy bien lo que es el hambre y la desnutrición, porque la padecen de forma habitual en sus propias carnes. Para tratar de dar un nuevo impulso a la lucha contra ese mal arranca hoy en Roma una Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria, convocada por la FAO y en la que participarán más de 60 jefes de Estado y de Gobierno.
Entre ellos no estarán, sin embargo, los líderes de los países más ricos del mundo. Ningún dirigenre del G-8 (a excepción del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que juega con ventaja porque la cumbre se celebra en su casa) ni los gobernante de los principales países europeos, incluida España, acudirán a la cita (...)
El panorama del hambre en el mundo es desde hace ya muchos años aterrador. Pero los estudios advierten que puede alcanzar cotas aún más pavorosas. Sobre todo porque se prevé que la población mundial aumentará en 2.300 millones de personas entre 2009 y 2050, y que el grueso de este incremento se registrará en los países en desarrollo. Lo que implica que el número de personas con necesidades alimenticias crecerá enormemente y, si no se toman medidas, el porcentaje de hambrientos puede subir de manera exponencial.
Pero no parece que la cumbre vaya a marcar el principio del fin del hambre en el mundo. La declaración que hoy firmarán los países participantes en la reunión de Roma no incluye, según denuncian varias ONG, medidas efectivas y eficaces para hacer frente a ese inmenso problema, sino que es una muestra más de la habitual palabrería (...)
Para reducir a la mitad el número de hambrientos se necesitan al menos 40.000 millones de dólares (27.000 millones de euros) al año de nuevos fondos.
El Mundo. 16/11/09. Roma
Empieza con un dolor en el estómago que se convierte en permanente y al que se añade un cansancio infinito, que convierte estudiar, trabajar o jugar en tareas extremadamente arduas. El organismo comienza a consumir su grasa y sus tejidos. La piel se hace tenue, tiesa, pálida y fría. El cabello se seca y se cae. Después de entre 8 y 12 semanas sin alimentos, se muere.
Un total de 1.020 millones de personas (un 15% de la población mundial) saben muy bien lo que es el hambre y la desnutrición, porque la padecen de forma habitual en sus propias carnes. Para tratar de dar un nuevo impulso a la lucha contra ese mal arranca hoy en Roma una Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria, convocada por la FAO y en la que participarán más de 60 jefes de Estado y de Gobierno.
Entre ellos no estarán, sin embargo, los líderes de los países más ricos del mundo. Ningún dirigenre del G-8 (a excepción del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que juega con ventaja porque la cumbre se celebra en su casa) ni los gobernante de los principales países europeos, incluida España, acudirán a la cita (...)
El panorama del hambre en el mundo es desde hace ya muchos años aterrador. Pero los estudios advierten que puede alcanzar cotas aún más pavorosas. Sobre todo porque se prevé que la población mundial aumentará en 2.300 millones de personas entre 2009 y 2050, y que el grueso de este incremento se registrará en los países en desarrollo. Lo que implica que el número de personas con necesidades alimenticias crecerá enormemente y, si no se toman medidas, el porcentaje de hambrientos puede subir de manera exponencial.
Pero no parece que la cumbre vaya a marcar el principio del fin del hambre en el mundo. La declaración que hoy firmarán los países participantes en la reunión de Roma no incluye, según denuncian varias ONG, medidas efectivas y eficaces para hacer frente a ese inmenso problema, sino que es una muestra más de la habitual palabrería (...)
Para reducir a la mitad el número de hambrientos se necesitan al menos 40.000 millones de dólares (27.000 millones de euros) al año de nuevos fondos.
ESTADOS UNIDOS Y CHINA HACEN FRACASAR LA CUMBRE DE COPENHAGE
El País. 16/11/09. Singapur
Estados Unidos y China, los mayores contaminantes del mundo, han hecho oficial el fracaso de la conferencia del clima que se celebrará el mes próximo en Copenhague. Los líderes de ambos países, apoyados por algunas de las principales naciones emergentes del mundo, han comunicado este domingo en Singapur al Gobierno de Dinamarca que no será posible conseguir en esa ocasión un acuerdo vinculante que permita la reducción de emisiones de dióxido de carbono.
En su lugar, se intentará lo que se ha llamado retóricamente acuerdo en dos etapas, y que, en realidad, consiste en hacer en Copenhague una mera declaración de intenciones, pero se postergarán los compromisos obligatorios para un momento posterior, quizá para otra conferencia que debe de celebrarse el próximo año en México.
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