Entre el
solsticio de invierno de 2012 y el equinoccio de primavera de 2013 arrancó el
nuevo ciclo planetario, y esa etapa tan especial también lo fue para mí. Me
sumergí en un retiro consciencial que fue tan rico en experiencias y tan
revelador que derivó en el libro “Dios”, que sigue a la venta publicado por
Editorial Sirio. Todo ello constituyó la materia de la segunda entrevista que
me hizo Francesc Prims, actualmente coautor conmigo en algunas obras, y que fue
publicada en la revista Athanor.
Francesc Prims destacó por su brillante labor como entrevistador años atrás,
por lo que también Editorial Sirio publicó una extensa recopilación de
entrevistas suyas en el año 2015, en el volumen Nuevos paradigmas. Ya en esa ocasión tuve el honor de que
seleccionase la primera entrevista que me hizo para ese libro. Pero quedó
pendiente de mayor difusión esa segunda entrevista tan especial, y por fin acaba
de ver la luz más allá del ámbito de lo que fue la revista Athanor. Francesc Prims ha visto oportuno incluirla en un nuevo
volumen de entrevistas en las que comparte espacio con figuras como Bruce H.
Lipton, Joe Dispenza, Sesha o María Toscano. El volumen se titula “Realiza tu
potencial. Vol 1: vías de transformación”, y está a la venta en la página web
de Editorial Consciente (www.editorialconsciente.com;
por cierto, también ahí encontrarás nuestro último libro en coautoría, “El
habitante del mundo nuevo”). Mi entrevista ocupa la friolera de veinticinco
páginas en el volumen; en consenso con Francesc Prims, reproduzco la primera
pregunta y mi respuesta a modo de aperitivo:
¿Cuánto duró tu retiro consciencial y cómo se desarrolló?
Me recluí en
torno al 10 de diciembre de 2012. Tenía muy claro que iban a ser meses de introspección,
de silencio y de meditación, de estar muy atento a mi interior, a las cosas que
iban a ir fluyendo. Así me mantuve hasta finales de abril de 2013. Durante ese
período percibí cosas que tuvieron un perfil muy fenomenológico, lo cual para
mí fue lo menos importante; me interesaron más las percepciones, sentires,
visiones y mensajes que obtuve acerca de por dónde vamos cada uno y como
humanidad.
Las cosas que
percibí y las sensaciones que tuve fueron nucleándose en torno a un eje
central, el cual, ante mi sorpresa, fue Dios. Digo ante mi sorpresa porque en
los años anteriores Dios ya había estado presente en lo que había compartido en
mis talleres y conferencias, pero no de un modo monográfico. Sentí que la
humanidad ha llegado, fruto de su proceso evolutivo, a un estadio en que nos
corresponde coger el toro por los cuernos; ir directamente a Dios, llámele cada
cual como lo considere oportuno: Alá, Fuente, Energía, Padre, Madre…
La humanidad
siempre ha tenido a Dios ahí a lo largo de su discurrir evolutivo, pero ha
tenido una determinada percepción de lo divino. Lo que he venido sintiendo es
que ha llegado el momento de que colectivamente empecemos a percibir la
divinidad de una manera que podríamos denominar más real, más cercana a la
realidad.
========================================================================
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.