Cine cine cine ciiineee, más cine por favor…

Literalmente en estos tiempos nos están vendiendo una película, la película de nuestras vidas. Ya han pasado bastantes meses desde que comenzó este despropósito y muchos, muchísimos científicos y expertos de todo el mundo han mostrado y demostrado las incongruencias ante la plandemia del Cobi. No obstante, parece que la población en general permanece aislada de toda información que cuestione la verdad oficial. A veces me invade una sensación de irrealidad cinematográfica ante lo que estamos viviendo, sobre todo por la mañana en cuanto salgo a la calle y veo la procesión de los Enmudecidos hasta las Cejas. Me siento un poco el protagonista de esas películas de extraterrestres que han robado la mente de las personas y tú tienes que disimular para camuflarte entre ellos. El seguidismo del público en general me recuerda a la parte final de La naranja mecánica, cuando al protagonista le hacen ver una película que le causa gran dolor mientras le mantienen atados los parpados. Podríamos decir que la manipulación mediática ha evolucionado tanto que ahora la gente se sujeta voluntariamente los párpados delante de la caja que atonta. Respecto a este tema les recomiendo el visionado del documental El dilema de las redes de Netflix. Básicamente este documental refleja que nosotros no estamos viendo a internet, es Internet la que nos está viendo a nosotros. El nombre de Internet como entidad de inteligencia artificial queda un poco soso así que a partir de ahora la llamaré Skynet, como la inteligencia malvada de Terminator. Cada vez que haces una búsqueda de cualquier tema, Skynet te da la información que quieres ver, y, lo más importante, a cada uno nos da una información diferente. ¿Por qué hace todo esto?, porque cuanto más tiempo pases delante de la pantalla más posibilidades tienes de comprar algo. El mercado de internet es el de la atención humana, nuestra atención es una de nuestras principales energías. Nuestra atención determina nuestro comportamiento y muy probablemente nuestra energía económica se dirigirá hacia aquello que nos llama la atención. Por eso Skynet te ofrece en internet una trampa de araña, un laberinto donde todo lo que busques te da la razón para que sigas internándote más en el laberinto. El auge de las noticias falsas se debe a que las noticias falsas en las que tú crees son seis veces más atractivas para ti que la verdad. De ahí que, por ejemplo, la sociedad norteamericana esté actualmente hiperpolarizada en dos bandos, porque lo que les muestra Skynet es una realidad alejada doce veces una parte de la otra. Cada vez que entras en internet empiezas a jugar una partida de ajedrez contra Skynet sin saber que estás jugando una partida en la que además llevas años perdiendo. Los algoritmos llevan años sondeándote para saber cómo reaccionas ante determinados estímulos y así poder predecir tu comportamiento y conseguir una venta. Por ejemplo, Skynet sabe que después de mirar un vídeo de gatitos tu estado de ánimo te lleva a comprar chocolate y te manda un anuncio. O sabe que cuando estás menos de 88 centésimas de segundo mirando cada foto es que estás a punto de salir de Facebook…, y te manda rápidamente una solicitud de amistad de una persona que sabe que consideras atractiva, porque ha descubierto tus gustos a base de ensayo-error y te vuelve a enganchar y a poner anuncios… etc. La conclusión final de la que habla el narrador es básicamente  cual es la verdad. En un mundo de noticias falsas manipuladas la clave está en a que hilo de Ariadna te has de agarrar para salir del laberinto. ¿Se acuerdan que en una reflexión anterior hablaba de cómo nos manejan con el truco de Problema Reacción Solución? El Problema es que con tantas noticias falsas la sociedad se radicaliza en dos bandos que crean conflictos entre ellos e inestabilidad. La gente Reacciona y querrá que esos conflictos se solucionen y vuelva la estabilidad. Solución: el Estado será el que ofrezca la verdad única a través del Ministerio de la Verdad y usará herramientas de censura que ya estamos viviendo actualmente. Esconden la Berdad con B auténtica entre un montón de mentiras para imponernos su falsa verdad con v.

        La ATENCION con mayúsculas es una de nuestras principales energías, si mantenemos durante un tiempo nuestra Atención en algo porque nos atrae, acabamos considerando que eso es verdad. De ahí que el Estado se preocupe tanto de la escolarización y de que sea obligatoria, para que la Atención de los niños se enfoque en determinado temario durante años, en una falsa verdad, y que cuando salgan de la universidad crean que todo lo que les han enseñado es cierto y verdadero. Dicen los Jesuitas “Dame un niño hasta los siete años y te devolveré un hombre”. Una vez programado hasta los siete años, años en que el inconsciente está muy abierto y toda la información va hasta el “fondo”, ya estás formado como adulto a menos que conscientemente te desprogrames a propósito para solucionar problemas en tu vida de adulto. Un psiquiatra dijo, “si el niño tiene que elegir entre ser el mismo o ser aceptado, elegirá siempre el ser aceptado”. Más abajo explicaré casos concretos en los que trabajo y cómo afrontarlos. Esto nos lleva a comprobar que las entidades que nos manejan, el Estado creado por ellas para manejarnos en la realidad física, y el estado actual de las cosas, necesitan de tu energía y de la energía de tu atención para mantenerse vivo y mantener el estado actual de las cosas. ¿Se acuerdan del famoso “creer para ver”?, si consigues que una gran cantidad de personas crean una idea que tú has metido en sus cabezas, puedes hacer que esa idea se densifique creando una realidad.

        Lo que voy a explicar a continuación es el resultado de mi experiencia de vida y deducciones propias que me permiten trazar un mapa, siempre cambiante, de lo que yo creo que es la naturaleza de la realidad. Creo que es importante dar cuenta de mis fuentes para que se vea de donde parto y se valore la calidad de lo que escribo. En principio no tengo superpoderes, no canalizo a nadie, a mis maestros los dejé en la E.G.B., el único extraterrestre que conozco es el E.T. pequeñajo del dedo encendido y a mis meditaciones más sublimes en mi pueblo le llaman siestas. Salvo los años que tuve que tomar la medicina Ayahuasca para sanarme en plan expeditivo, que yo sepa no tengo más información que la que he conseguido por mis propios medios. Sin entrar en detalles mi versión actual de la realidad incluye un universo mental holográfico multidimensional, donde nuestra consciencia es nuestro único activo Real unido por un hilillo a una totalidad que podemos llamar Dios, Elvis o Messi según gustos. En ese océano de consciencia multidimensional hay entidades de todo tipo, ambiciones y pelajes. Mi opinión actual también incluye que existe un deseo evolutivo fundamental de todo ser en fundirse de vuelta a una no-dualidad de la que partimos y de cuyo nombre no quiero acordarme. Por contra opino que hay otras entidades de las llamadas “malas” que no tienen tantas ganas de fusionarse porque significaría tener que sanar su consciencia, y por lo tanto revivir una enorme cantidad de dolor y tienen miedo de ello. Por lo tanto prefieren mantener una falsa individualidad y sentirse dios de su propio universo a toda costa con tal de no ver su auténtica esencia. De la misma forma que para mantener sus mansiones, los superricos necesitan una gran energía de gente comprando sus discos, su ropa, sus ordenadores, sus perfumes…, esas otras entidades etéricas necesitan atrapar muchas otras entidades para aprovecharse de su energía psíquica, y de otros niveles, para sostener su propio universo involutivo en marcha. Una vez que eres atraído a su egregor, su principal objetivo es mantenerte en el inculcándote una dualidad, una densidad, una identidad dual aparte de las demás identidades, un sentimiento de necesidad, carencia e insatisfacción que no se llena con nada… salvo que recuperes tú conexión con lo que verdaderamente eres. Lo dicho, bienvenidos a la tierra, bienvenidas a la matrix. Llegados a este punto debo aclarar que me he encontrado con mil teorías sobre cómo funciona esto: que si el universo es exclusivamente creación del ego y Dios aquí no pinta nada, que si Dios se expresa a través de esta creación y los que quieren volver a Él pueden subiendo por sucesivas frecuencias y dimensiones…, de todo hay y yo sólo sé que no sé nada. También añadir como decía Jorodorowky “sólo sé que no sé nada, pero al menos sé que no soy el que no sabe nada”, no sé si me entienden.

        Dejando atrás temas más metafísicos en los que me puedo llegar a perder, mi trabajo práctico es trabajar y desanudar las ataduras de las personas a su sufrimiento. Es un tema enorme y como dice la adivinanza sobre cómo se ha de comer un elefante, la respuesta sensata es bocado a bocado. Como decía más arriba hasta los siete años se nos programa con todos los tabúes, limitaciones, culpas y vergüenzas heredadas de nuestros progenitores y de nuestra sociedad en general. De niños lo sobrellevamos pero de adulto muchas de esas programaciones contradicen nuestra verdadera naturaleza y son temas que hemos de resolver y desprogramar o somatizar físicamente sus consecuencias. Lo que contradice nuestra programación y no queremos gestionar lo mandamos a la famosa sombra de la que hablaba el otro día. Por ejemplo el otro día en terapia una chica joven con una angustia difusa y conflictos con su hija, en realidad quería matar a su expareja y “mal” padre de su hija desde hacía ocho años. Ella negaba inconscientemente ese deseo de asesinar porque no sé qué mandamiento dice “No mataras”, y me parece muy bien que esté ese mandamiento ahí. El problema es que para joder más te dicen que hasta los pensamientos son pecados y ya eres culpable si solamente lo piensas. El problema realmente no es que quieras matar (mayoritariamente ninguno llevamos esa idea adelante), el verdadero problema es que ignores o reprimas ese deseo de matar. Esa energía en ti pide ser reconocida y si no es atendida va afectando energéticamente tu equilibrio y puede somatizar físicamente. Una vez atendido esto y tras la catarsis correspondiente de alivio porque por fin esa información sale a la luz y se la atiende, sólo queda resolver el conflicto con la expareja y liberarse.

        El Estado, la educación, la religión, la moral... incluso nuestra programada familia, tejen una malla de culpas, odios, miedos en la que te vas enredando y te vincula todavía más a esta realidad, para único beneficio energético de las entidades que han montado este resort de terrort. Si piensas en nosotros como un robot con billones de respuestas preprogramadas ante las situaciones de la vida, como el “Que aproveche”, “gracias”, podrás empezar a comprender quién eres y quién no eres. La única forma que hasta ahora conozco de liberarte de tu programación es liberarte de tu odio, de tu miedo, de tu apego…. Tus odios, miedos y tu dolor te atan a tus programas inconscientes hasta que te duela tanto que estés dispuesto a desprogramarte y vivir de otra manera. O morirte así y que te den un cuerpo nuevo en una nueva encarnación mientras los de arriba te siguen sorbiendo con una pajita incrustada en tu cerebro. Hay mil formas de sanarse, entre ellas y una de las más obvias, es que si la otra persona es un robot programado desde que nació, al igual que tú por ahora, todo el daño que te hizo fue algo que era absolutamente imposible que cambiara, estaba programad@ para ello y no tenía la más mínima posibilidad de hacer otra cosa. Y tu mientras la sigas o lo sigas odiando tampoco podrás liberarte de esa programación, sin más. Si te maltrato una madre cafetera que sepas que esa madre cafetera jamás te podría haber dado una tostada. Sólo una madre tostadora podría darte la tostada que tú hubieras preferido, pero tu vida no fue así. Es ridículo odiar algo que es imposible que cambie, sólo puedes vivirlo desde otro punto de vista, otro estado de conciencia. Me viene el ejemplo de alguien que odia mucho el sol y cada mañana sube al tejado a maldecirlo. El sol seguirá saliendo cada día y el maldiciente hará mucho que estará enterrado y cocido en su propia rabia. Puedes pensar en tu madre como un cepo de osos de los de los dibujos animados. Tu metes la mano una y otra vez y el cepo te la machaca una y otra vez porque tiene una programación y un muelle que sólo sirve para hacer eso. Suena ridículo que tu llores porque el cepo te muerde una y otra vez y lo culpes de tu dolor, en vez de darte cuenta que eres tú la que tienes la responsabilidad de no meter la mano. Otro sencillo truco de conciencia es darte cuenta real de que no hay nadie fuera que te pueda afectar, eres tú y solo tú el que se monta el lio en la cabeza. Hay gente que todavía odia mucho a alguién que lleva años muerto. El muerto, hiciera lo que hiciera, ya no está. Eres tú el que sostiene esa energía en tu mente, nadie más. Hasta que dejes de seguir culpando a esa persona muerta y aceptes la responsabilidad de que tus emociones y tu mente es tuya, no podrás liberarte de esa programación y sufrirás lo que quieras seguir sufriendo. Aunque esa persona siga viva y siga “jodiendo”, eso sólo significa que tienes que tomar decisiones en tu vida para que eso no esté en tu vida o que esté en el lugar sano que le corresponde, por ejemplo que tu madre no mande en tu casa. Hablando más de madres, el conflicto madre-hija es una constante en la vida de las mujeres que atiendo por lo que tengo muchos trucos para usar. Para que se tome conciencia de lo que he dicho siempre pongo el mismo ejemplo muy práctico para liberarte de programas, con las distintas personas, o situaciones de tu vida. La visión que tú tienes de tu madre se puede resumir en una cuerda tensa en la que tú tiras de un extremo y tu madre del otro, y así ha sido toda tu vida, agotándote. La realidad es que sólo tú eres la que estás tirando de ambos extremos de la cuerda y tu pobre madre, aunque sea una bruja, se sostiene a duras penas en equilibrio sobre la cuerda que tú y tu doble mantenéis tensa. Cuando te das cuenta de esto, de tu absoluta responsabilidad en lo que haces o lo que sientes, sueltas la cuerda y la parte tuya que quiere atarse al sufrimiento se cae de culo junto con tu santa madre. Y digo bien cuando digo santa porque tu madre te puso el examen que necesitabas aprobar para liberarte de las ataduras que te ataban a ella y por tanto a esta realidad artificial. Vivir tus emociones y pensamientos hasta el final sin apegarte a ellos ni juzgarlos y dejando que ese tipo de energías pasen a través de ti te libera de la esclavitud de la matrix.

        Así es cómo funciona este chiringuito y cómo nos mantienen atados a él, con nuestras emociones y pensamientos alterados que nos atan a nuestros programas y por tanto a esta realidad. El famoso “divide et impera”, “divide y reina”, es la perfecta constatación del mecanismo que usan estas entidades que quieren separarse de “Dios” y por lo tanto crean y necesitan una dualidad y que tú les ayudes a sostenerla. No se trata de la ficción de no sentir o pensar si no de sentir y pensar hasta el final y darte cuenta que en el final de esa emoción no estás tú, sólo la creencia de lo que eras. Cuanto más te liberas de tus programaciones y creencias más puedes conectar con aquello  que realmente eres, llámalo dios, parte divina, alma o como decimos en Galicia “chámalle X”. Cuanto más dolor emocional provocado por tu visión dualista de la realidad en forma de familia, estado, barça, Vox, Covid-19… liberes mayor será tu conexión a tu verdadero origen y menor trascendencia involutiva en tu vida tendrán las cosas del mundo. Llegados a este punto incluso la idea de la muerte se pone en una perspectiva universal de eterno presente no-dual  en la que le podemos quitar todo su dolor y dramatismo. Más bien dicho que “quitar” es la comprensión de que no existe nada más que la no-dualidad o divinidad donde todas las ilusiones y dualidades se diluyen.

        Vamos acabando con esta sentencia del Bhagavad Gíta:

“Contento con tener lo que por sí sólo llega

Más allá de los pares, liberado de la envidia.

Sin apego al éxito ni al fracaso,

aun cuando actúe, no se encadena.

Hay que reconocer como eternamente libre

a quién no abomina, ni anhela;

porque quién se ha liberado de los pares,

fácilmente se libera del conflicto.”

        Todos somos compañeros de viaje imprescindibles para nuestro aprendizaje. Incluso los que se comportan como monstruos, hacen la labor de volver la vida terrenal intolerable para obligarnos a ir más allá de lo que creemos que somos y de las etiquetas como “intolerable”.  Toma las medidas terrenales sensatas que creas y no desperdicies energía en odiarlos porque los estarás alimentando. En mi experiencia las personas que no quieren sanar su interior tienen que depositar su fe, su confianza, y su esperanza de sanación en el mundo exterior, en la dualidad, en el Estado. No los culpes ni te enfades por ello, porque hasta que no empiecen a sanar, son robots repitiendo programas sin posibilidad de elegir otra cosa. Comprende que hasta la dualidad y el mal sirven para que encuentres tu propio camino de vuelta a Casa.

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Autor: Cándido Granada Álvarez (conexion@candidogranada.com)

www.candidogranada.com

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