El nuevo Reality show de los ETs: “Cómo invadir un planeta”

-Avistamientos: Dejarse ver en sitios concretos concurridos por fans del mundo UFO, para más adelante aparecer en otros lugares aleatorios entre gente común. Todo ello durante breves segundos y, a poder ser, creando confusión entre la gente.

-Canalización: Ir haciéndose un nombre como ETs de buena voluntad mediante técnicas de marca personal y “branding”, de forma que el grupo o raza se vaya haciendo conocido, filtrando a canalizadores textos edulcorados de luz y paz.

-Selección: Crear pequeños grupos de élite, debidamente seleccionados. Activarles o implantarles determinados recuerdos en la memoria y sugestionarlos para que piensen que son elegidos para una “misión” que salvará el mundo. Si no funciona con la activación del arquetipo del Salvador o Mesías, no pasa nada, porque se motivarán igualmente al nombrarlos “divulgadores” de la verdad. Nada motiva más, con permiso del Poderoso Caballero Don Dinero, que la codicia por notoriedad o por la adquisición de un conocimiento mejor que el de cualquier otra persona del planeta.

-Contacto: Ahora directo por correo electrónico, sin interferencias de médiums y canalizadores, con esos grupos de élite para que los “elegidos” transmitan y divulguen la revelación de “secretos”, que satisfarán a las mentes ávidas de información privilegiada. Obviamente, lo que se da es una información previamente seleccionada, envuelta en misterio, aunque la mayor parte ya circula por la red para el que la sepa o quiera buscar.

-Divulgación: Comienza la divulgación masiva por YouTube, la competencia feroz entre los divulgadores, la creación de grupos de aficionados mediante Telegram, Discord, etcétera. Por medio de personas denominadas “conectores” se organizan subgrupos para ir delimitando por niveles de entendimiento e intereses a los aficionados. De esta forma es más fácil monitorear desde las naves, desmarcándose los que ya pueden ser considerados como los adeptos, los fanáticos, los happys, los descreídos, etc.

-Drenaje: Mientras los integrantes de cada grupo se sincronizan en frecuencias, se les va drenando la energía. Sabemos que “donde pones tu atención pones tu energía”. Los vídeos son largos, con mucha paja, la mayor parte de las veces con información repetida. Mucho tiempo perdido para nada. Cuanta más atención y tiempo ponemos en ver vídeos de divulgadores y estar en los chat, menos tiempo para dedicar a otras cosas más productivas, como el descanso, acabar ese curso que empezamos, dejar de procrastinar en el trabajo, pasear tranquilamente sin los auriculares en las orejas, etc.

-Adoctrinamiento: Si alguien llega inicialmente a esta información ET con el noble propósito de crecer como persona, conocerse a sí mismo o encontrar un refugio para encontrar la calma espiritual, este no es el lugar. En el mejor de los casos, por resonancia, se encontrará con un pequeño grupo de personas lúcidas, en las que podrá compartir abiertamente sus ideas, sus tribulaciones y que serán más amigos que otra cosa.

Para el resto comienza un “Gran Hermano” moni toreado (el espacio entre “moni” y “toreado” ha sido inspiración del corrector ortográfico).

Ya sabemos cómo va esto: que si estáis todos oprimidos, encarcelados, en prisión, que os estamos protegiendo de invasores de razas malignas, que no os podemos ayudar pero no os preocupéis porque tenéis todo el poder dentro de vosotros... Vamos, chicos, podéis hacerlo, aumentad esa vibra y podréis saltar a la 5D y libraros de esos lagartos sin escrúpulos. ¡A por ellos que son pocos y cobardes!

Nosotros os estamos mirando desde aquí arriba, sin hacer nada, porque no nos está permitido intervenir.

-Aprovechamiento: El virus ya está esparcido. Nada de evitar infecciones y pasarnos el Norton, que las vacunas son muy malas. ¿Qué virus? Esa complacencia psicológica que lleva a un individuo a adherirse a una corriente de pensamiento grupal, antes que a pensar cosas por sí mismo. Pereza mental, adormecimiento, para aquellos que se sienten cómodos y seguros, no importa en qué sistema de creencias, solo porque muchos otros se adhieren. Radicalismo, para quienes se jactan de pertenecer a un grupo numeroso arrogante y tontorrón, convencidos de que tienen el monopolio de la verdad y que están listos para reprimir, contener o asesinar a los enemigos reptilianos, en este caso.

Forman alianzas, se erigen en representantes de un supuesto grupo de elegidos, se auto denominan guerreros de La Luz o algo que suene a cruzada contra el mal y se vuelven intolerantes y cuadriculados. No se sabe qué fue de aquella mente abierta que ellos mismos propugnaban, se perdió por el camino.

Ya tenemos soldaditos. Mediante avanzada tecnología y sistemas de control, se toma posesión de la voluntad de algunas de las personas clave, que serán utilizadas en el momento oportuno.

-Entretenimiento: A los más débiles se les sigue hablando del país de las maravillas 5D, cuantas más expectativas mejor. Hay que mantener viva esa ilusión, para mantenerlos infantilizados y dependientes. Cantos de sirenas por aquí, empoderamiento espiritual mezclado con coaching yanqui por allá...

-Decepción: El grupo se alimenta de nuevos adeptos mientras para otros empieza a resultar decepcionante darse cuenta de que no van a venir las naves de ETs rubios de ojos rasgados a llevárselos entre cánticos y luces rosadas y violeta, y que todo esto no es el cuentito de los ETs alados que los ayudan a volar hasta que les salgan sus propias alas.

Adiós promesas, adiós a las descripciones de deslumbrantes planetas exóticos de edificios de cristal.

¡Qué decepción! No hay alas, no hay plumas, aquí lo que hay es mucho cuento.

La decepción, esa gran maestra libre de la ambición del ego, es una puerta de salida del programa que inicialmente nos sacó de ruta a dar una vuelta por una tangente.

Es una invitación a volver a uno mismo, a poner de nuevo los pies descalzos sobre la Tierra, sobre este planeta que es apenas un minúsculo grano de arena en todo el Universo. Humanos de pies descalzos sobre la Tierra, conscientes de cada paso, de cada respiro. Que otros vuelen con alas de papel, qué importa; otros aquí, arrancándonos las plumas.

=======================================

Autora: Uracha de Abba (mcotomillan@hotmail.com)

=======================================