Sumergirse en el vacío

Para muchas personas, la sensación del vacío es tan real que llegan a encontrarlo en su interior. Precisamente, estas mismas personas son las que experimentan los mayores cambios cuando conciben que el vacío es, simplemente, una ilusión.

Puedes hacer la prueba con un vaso antes de introducir en él ningún tipo de líquido.

Puedes sentarte en calma, con él en la mano, observarlo y plantearte si realmente el vaso está vacío.

Evidentemente, no tiene líquido, pero eso no quiere decir que su interior esté sin ocupar. Como mínimo, en su interior se halla el mismo tipo de calidad de ambiente que le rodea.

Si te sumergieras con el vaso en el mar, podrías vivir una experiencia similar. El vaso estará lleno de lo que le rodea.

Una vez logras este tipo de mirada, es más fácil concebir que el vacío no existe.

También resulta más fácil poder sentir el equilibrio interno que nos aporta la experiencia de unidad que genera la consciencia de que lo que nos separa de los demás seres vivos y objetos está compuesto de lo mismo que nos forma y nos compone internamente.

Desde esta perspectiva es desde donde es posible mimar el espacio que creías vacío de tu vivienda y llenarlo, con amor, de sentido.

Crear una energía de hogar armónica y serena facilita la experiencia de sumergirte en ella cada vez que llegas, reforzando con ello tu consciencia de unidad y lo capacidad de amar.

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Autor: Andrés Tarazona (andres@andrestarazona.com)

https://andrestarazona.com/

Todos los jueves, desde el 7 de noviembre de 2019, Andrés comparte en este blog una serie de publicaciones centradas en

el Diseño Sentido: interiorismo y diseño consciente de viviendas, comercios y empresas que mejoran la calidad de vida.

Todas están a tu disposición de manera gratuita a traves del e-book Habitar, al que puedes acceder a través de este enlace:

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