El pasado 8 de noviembre se publicó en este blog la entrada titulada ¿Para qué el dinero?:
Con ella como telón de fondo, Ana ha insertado en su blog Detrakamanoli (http://detrakamanoli.wordpress.com/blog/) el texto que se recoge
bajo estas líneas, titulado La puesta en práctica de la creatividad y su relación con el dinero.
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Anteriormente he desglosado las tres
primeras características de la “Esencia Detrakamanoli”, hoy voy a ahondar en la cuarta
característica: “Trabajo digno”, “sueldo digno”.
Cuando hablo de trabajo digno me refiero
lo primero a poner en práctica las cualidades expresivas, dones o talentos de
cada uno. Ese trabajo que es la expresión que fluye de nosotros, que no nos
cuesta esfuerzo realizar ya que sale de forma innata.
Lo primordial cuando hablo de trabajo
digno es permitirnos conectar con nuestros talentos, los cuales a veces no
hemos sabido reconocer y hemos elegido la “comodidad de sobrevivir”. A partir
de reconocer y reconectar con nuestras “necesidades expresivas”, el paso
siguiente es ponerlas en práctica, y después compartirlas. Y aquí es donde voy
a profundizar.
Compartir la expresión, compartir el
trabajo que cada uno realiza como necesidad expresiva, es compartir energía (la
energía de los talentos que en uno practica). Cuando menciono “sueldo digno” me
refiero a permitirse que toda esa energía que compartes practicando tu “profesión”,
venga de regreso a ti para poder seguir ejerciendo tus dones y talentos (que es
la expresión de lo que eres). En mi experiencia he visto que el trabajo que
realizo, la creatividad, es la expresión de lo que soy, no me cuesta esfuerzo
ponerlo en práctica, sí que me cuesta dinero el material, y es inevitable que
en el presente el dinero es un instrumento que nos proporciona cubrir unos
gastos para vivir.
A veces he oído frases asociadas a la
creencia de que sobre todo, los artistas, trabajan por amor al arte, y sí es
cierto, amor a lo que expresas y como necesidad expresiva de lo que uno es,
pero no significa que al hacerlo por amor, tenga que ser gratuito. Lo que
entregas es energía, ya sea a través de una pintura, una canción, un poema, una
falda… esa energía puede regresar al artista de formas diferentes, y una de
ellas es el dinero, que te proporciona el poder seguir creando y expandiendo
tus dones y talentos. No se trata de avaricia por parte del artista, sino que
el dinero forma parte de la humanidad y es una forma más de energía.
Es elección de cada uno la forma en que
damos la energía a través del dinero, sabemos lo que estamos comprando? sabemos
la forma en que está hecho el producto? ¿en qué condiciones de trabajo?
¿compramos desde la avaricia de tener más? ¿o compramos siendo conscientes del
valor de lo que compramos y dónde estamos dando nuestra energía/dinero?
Estas preguntas se pueden aplicar a casi
todo lo que se puede comprar con dinero: desde mobiliario para una casa,
material de construcción, ropa, plantas, comida…
¿Somos conscientes de la energía que
mueve el dinero?
¿El dinero para qué está? En esta
entrada en el blog de Emilio Carrillo comparte su visión sobre ello:
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