Suspensión de las charlas en Gijón, Madrid, Jaén y Albacete

            Poco antes de viajar hacia Madrid y Lleida, donde el viernes 21 y ayer sábado 22, respectivamente, impartí dos charlas coloquio (muchas gracias a los organizadores, que crearon una maravillosa oportunidad de compartir y recordar lo que Somos y Es), tuve conocimiento de los resultados de las pruebas médicas que, de modo periódico, me efectúan. Unos resultados que vienen de la mano de la Providencia, lo sé bien, y que comparto con vosotros seguidamente. No me preocupan ni inquietan lo más mínimo, os lo aseguro, aunque obligan a suspender los viajes y charlas que tenía previsto desarrollar durante el mes de octubre: Gijón (sábado 13), Madrid (sábado 20), Jaén (viernes 26) y Albacete (sábado 27). Sobre las charlas comprometidas y cerradas para el 16 noviembre (Valencia) y el 1 de diciembre (Zaragoza), se mantienen, aunque sujetas igualmente a los designios de la Providencia.

            Bastantes de vosotr@s sabéis que en noviembre de 2010 recibí una Bendición y todo un Regalo de la Providencia en forma de enfermedad. Debido a una caída mientras bajaba por un monte, sufrí una fractura en el peroné de la pierna izquierda. Lo que originó una trombosis en la vena femoral que me causó, a su vez, un infarto pulmonar. Las consecuencias fueron una experiencia cercana a la muerte, la hospitalización durante varias semanas y 10 meses de baja laboral.

            Fue una experiencia extraordinaria y dichosa que aceleró en mí el recuerdo de lo que Somos y Es. Y físicamente me recuperé satisfactoriamente de todo, si bien el pulmón derecho, en el que impactó el infarto, quedó marcado con una “condensación basal”, lo que es algo relativamente normal y debería ir desapareciendo con el paso del tiempo. Sin embargo, el control médico periódico que me acaban de hacer ha puesto de manifiesto que tal “condensación” sigue presente y no se ha reducido durante el último año. Lo que ha llevado a los médicos a barajar la hipótesis de que pueda tratarse no de un resto residual del infarto, sino de un tumor, aconsejándome que durante el mes de octubre me someta a diversas pruebas y esté de baja laboral.

            Como conocéis por el blog, sabía perfectamente que, en el contexto de la Metamorfosis en marcha, había llegado para mí –que Soy Tú, como Tú eres Yo- la hora de Nacer de Nuevo. Es decir, el momento de izar la Bandera Blanca en el Corazón; de la Rendición en el Amor puro; de la total Confianza en la Providencia, la Vida, la Perfección de cuanto Es y la Sabiduría Innata que todos atesoramos en nuestro interior; de la Vida Sencilla y Abundante centrada radicalmente en el Aquí y Ahora y ajena cualquier tipo de cuidado, contento, enjuiciamiento o deseo de conocimiento; del No-Hacer, diciendo adiós a la Vanidad en cualquiera de sus expresiones; de Vivir desplegando un Movimiento (Wu Wei) que fluya en el Tao (el “Ordo Amoris” de San Agustín) y sea el resplandor de la Quietud divina, eterna e inabarcable que brilla en nuestro Ser y No-Ser; de la activación de nuestra Esencia Crística y Búdica; de la Inocencia Consciente para contemplar el “Rostro de Dios” en todo y todos; y, desde luego, del Silencio Mental e Interior.

            De hecho, el pasado 16 de septiembre, en la entrada titulada Sobre las “motivaciones” de este blog, fijé la despedida del mismo para el 5 de diciembre, lo que iba unido a la meditada decisión de no asumir ningún compromiso de agenda (charlas, talleres,…) a partir de esa fecha. Visto lo visto, quizá la Providencia quiera, tendrá sus razones, que adelante el Silencio en el calendario a lo que a desplazamientos a distintos puntos de España se refiere.

            Pero no hagamos suposiciones. Centrado en el Aquí y Ahora, estoy en absoluta Paz y Armonía -lo mismo le ocurre a mi familia, con María Jesús a la cabeza-, aunque lamento profundamente la suspensión de las indicadas charlas y eventos.

            En la Unicidad que Somos, os pido que no sintáis ningún tipo de aflicción. Todo fluye, refluye y confluye en la Perfección de cuanto Es. No pongáis vuestro Corazón en mi cuidado, que tengo hace tiempo entre las azucenas olvidado. Al contrario, permitid desde vuestro interior que la Providencia se desenvuelva sin interferencias. Sentid la Alegría que me inunda, de instante en instante y en cada célula, como manifestación de la Felicidad que es nuestro Estado Natural. Y no tengáis duda alguna de que nuestra completa y total conexión-unión se halla muy por encima de las palabras, las charlas y los encuentros físicos. Son las ventajas de la Metamorfosis, ja, ja, ja.

            Y, por supuesto, el blog sigue en pleno funcionamiento.

            Grandes Abrazos y muchas Bendiciones de Amor y Gozo

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