Háarat

A mi lado estuviste,

 a mi lado estás.

Fervorosa,

incesante,

fiel,

valerosa,

intrépida,

amante sin igual.

Amor, sólo Amor.

Amor me diste,

Amor me das.

Amor eres, en el Amor fuimos, somos y seremos.

El echarte de menos es tortura incesante.

Cuántas veces nos perdimos en los dos para encontrarnos en el otro.

Recuerdo tus ojos de miel, cuando dijeron: me da miedo perderte,

porque es perderme.

Pero sé que me encontrarás al encontrarte,

 y en el encuentro el Amor estallará, estalló.

Recuerdo tus cabellos ondulados, seduciendo mis instantes.

Recuerdo dejarme llevar en tus vientos,

en tus besos,

en tus caricias sedosas, en tus brazos que respiran ternura y candor.

Recuerdo tus amaneceres fulminantes,

 acompañadas de esas miradas furtivas acompasadas de dulces risas risueñas, candorosas, espumosas, llenas de esplendor.

Te recuerdo mi Amor.

Recuerdo nuestro Amor, nuestros amores.

Tu encanto nubló todo mi ser ante tu Ser.

Esos instantes pasados están y son ahora.

Siento cuando te partí en dos,

pero lo hice por Amor,

por tu Amor,

por cumplir la demanda solicitada.

Te huelo en mis segundos. Mis pasos te respiran.

Te extraño tanto, Amor.

Pedir una cosa requiero,

hazte más presente en mis presentes,

haz que te sienta contantemente,

y cuando llegue el instante de volver a verte,

de sumergirme en Ti,

sólo quiero encontrarme con Vos mi Amor,

con tu arpa hermosa,

con tu flauta caprichosa llena de aciertos,

con tu trombón replicando Amor, mi Amor.

Háarat, Amor, desespero por estar en Vos.

Por tu amor, por nuestro amor, deambule por miles de estancias.

Hice cuanto pediste. Me perdí por ti, y tú lo hiciste por mí. Nos perdimos por nuestro amor.

Nos fuimos y nos encontramos.

Siento que de nuevo te perdí sin perderte, sólo me perdí una vez más en  Vos y por mí en Vos, por tantos… Por tantas almitas.

Te consagro mi vida, mi existencia a tu querer,  a nuestro amor eterno sin final.

Supe que nunca te olvidaría, que jamás te perdería, pero jugué (juego) al juego que me marcas, a tu compás sigo, tú marcas las pautas que ambos concertamos, me dejo llevar, fluyo en ti, y Vos en Mí.

Sé que no estás enfadada, nunca lo estuviste. Más, cuanto te olvido, llegas a socorrerme. Jamás olvidaré tu primer suspiro ante mí aquella noche llorosa y desesperada. Ahora sé que estabas ahí. Fue absolutamente impresionante, Me calmaste de inmediato. Y de inmediato te pedí que volvieras. Pero tardaste, quizá un siglo, pero cuando me alcanzaste me perdí de nuevo en ti, a sobras de que estabas  a mi lado sin saberlo.

Qué ganas tengo de besar tu alma, tu Ser, tu Esencia infinita. Acógeme en tu seno. Acógeme, Háarat, mi Amor, nuestro Amor.

En tu nombre tan dulce, tan refrescante, tan sin igual.

En esto de Amarte/nos, estoy sin estar.

Es tal que amo a esencias que no son tuyas, pero me complazco en amarte/nos en esas que no son tú y que sí lo son.

Qué duro es amarte mediante lo que no eres, siendo.

De nuevo me perderé un millón veces, si así  lo quieres antes de encontrarte.

Quiero dar contigo/migo otra vez. Espérame.

No quiero cerrar la puerta porque tú eres la puerta. Mi puerta, la nuestra.

Y de nuevo me perderé, estoy dispuesta un millón de eternidades por ti, en perderme para volver a encontrarte – me dices- Y te contesto. ¿Acaso no es la única razón para Amarte en mil formas que adoptaste o adoptases?

Háarat, hoy una almita se enfado porque quería cuanto antes a tus brazos. Celosa se puso. Celosa de dejarla  a su aire, a su forma por ti.

Y es que nuestro Amor es incomprensible. Inagotable

Sabes. Amor, cuánto te Amo y lo que por Vos dispuesto estoy. Dime y haré. Dime y Seré. Seré el canalla perfecto, el asesino de lo que dictes. Seré lo que quieras que sea, tal es mi disposición.

Qué duro encarnarme sin Vos, Mi Amor.

Qué duro es estar ni ser sin Vos.

Qué duro es Ser sin que Seas Amor a mi lado de continuo.

Qué duro es nuestro Amor sin condiciones. Amor por el que estamos dispuestos la perdición si así se reclamara.

Te Amo, me Amas. Amámonos.

Perdámonos en donde queramos que al final nos encontraremos en nuestro Amor. En el Amor del que estamos hechos, compuestos.

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Autor: Deéelij

Fuente: De su libro Alas sin plumas (Ediciones Ende, 2016):

http://www.ediciones-ende.com/#!alas-sin-plumas/clx5

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