Un día, de
entre los días que coronan los años y nacen del respirar de la Tierra,
paseábamos con el maestro por entre las callejuelas tortuosas y frescas de
Medina Runda. Y todo era quietud, porque emanaba de él, que iba en nosotros.
Hablábamos
sobre el dar y el recibir, cuando vino un mendigo y, postrándose ante Abul
Beka, le dijo:
—Hermano,
haz que este pobre cuerpo tome hoy comida; porque muchos son los días y las
noches que ayuna.
»Dame una
limosna y pediré al Gran Profeta para que por ti eleve súplicas al Cielo.
Mas él le
dijo:
—Hermano, si
yo doy algo has de saber que tan solo soy el medio, pues aquello que te doy
sale del sudor de la Tierra y del trabajo de «sus» manos.
»El trigo no
es tan solo el grano. Es la tierra y el agua unidas al tiempo y a la voluntad
del sol. Y hasta los vientos participan en su madurez. Así pues, cuando lo
sacrificas para tu alimento, estás sacrificando toda su evolución y a ti mismo
también te sacrificas. Mas son muchos los que creen que aquello que poseen o
les ha dado la vida es de ellos. Es por estos por los que tienes que pedir,
para que dejen de hacerse daño. Porque si yo te doy, no sigo al hacerlo sino la
voluntad del Cielo. Pero si guardo para mí lo que te pertenece, es porque estoy
más necesitado de ti que tú de mí, y aun sin darme nada, eres tú quien me ha
dado.
»Toma pues y alimenta tu cuerpo con estas monedas
y a tu espíritu con estas palabras para que también tú te realices en el dar.
Y,
volviéndose a nosotros, nos dijo:
—¿Qué
sería de aquellos que dan si no hubiese nadie a quien dar? Más aún: los que
están para recibir ¿no son quizá aquellos que siempre dieron.
======================================================
Autor: Cayetano Arroyo
Fuente: Diálogos con Abul Beka (Editorial Sirio)
Nota: En homenaje a la memoria de Cayetano Arroyo y Vicente Pérez Moreno,
un texto extraído de los Diálogos de Abul Beka se publica en el este blog todos los
miércoles desde el 4 de octubre de 2017.
======================================================
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.