Cada momento es el fruto de eones de tiempo.
Y cualquier momento es una ventana a todo el tiempo...
A todo el tiempo del mundo...
a todo el tiempo del Cosmos...
a todo el tiempo de la Vida...
a todo el tiempo del No-Tiempo...
a todo el tiempo del No-Tiempo...
a toda la Consciencia.
Recuérdalo cada vez que respiras,
cada vez que tu corazón late,
cada vez que de tu boca sale una sonrisa
o de tu ojos brota una lágrima.
En memoria de Tom Wolfe y "El Ángel que nos mira"
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Autor: Emilio Carrillo
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