Sobre algunas experiencias prácticas de expansión consciencial

Dentro de la serie de entradas que se vienen publicando en el Blog dedicadas a recoger Aportaciones para la plasmación de la consciencia expandida y la red consciencial, con fecha 11 de febrero de 2010 se insertó un escrito de Concha Redondo titulado Tertulia: una práctica concreta para la expansión consciencial. En ella se informaba de la práctica y la metodología de una Tertulia de la Búsqueda, que con carácter intergeneracional se desarrolla periódicamente en un centro docente.

Además, esta experiencia se completa con encuentros con niños de corta edad, a los que se visita en el aula docente y con los que efectúa un intercambio de reflexiones sobre asuntos trascendentes para los que, según los clichés preestablecidos, los pequeños no se hallan “preparados”. Así explica Concha esta iniciativa:

Pero en estas relaciones intergeneracionales faltaban los niños pequeños y quería experimentar la aportación que ahora he comprobado: los mayores (no sólo los padres, abuelos y profesores que hacen una labor importantísima) pueden hacer que los niños vayan siendo conscientes de la grandiosidad de sus vidas, de que pueden elegir cómo vivir y para qué; y en sus miradas se ve que comprenden que estamos aquí para que el mundo sea mejor por nuestro respeto, amor y responsabilidad. Manuel, uno de los niños con sus ojos brillantes lo expresó cuando le pregunté que había aprendido: " ¡Qué puedo elegir!".

Dado el interés que para much@s amig@s del Blog pueden tener estas actividades, se difunde seguidamente dos valoraciones sobre las mismas: de José Carlos Cuerda a propósito de la Tertulia; y de profesoras de los niños pequeños, en lo referente a los encuentros con ellos.

Sobre la tertulia (José Carlos Cuerda)

Vaya buena red social la Tertulia Intergeneracional del Colegio Santa Ana. Mil gracias por la invitación, y por el rato que pasamos juntos compartiendo reflexiones, que disfruté mucho. Es increíble la energía que se genera en una habitación cuando un grupo de personas compartimos mesa para poner en común nuestras ideas con el simple objetivo de disfrutar del intercambio, ¡Qué fuerza!, ¿verdad? … ¡Y cuánta luz se desparrama! El tema del miércoles, las redes sociales, nos permitió abordar muchas cuestiones importantes.

Internet es ineludible, porque es lo que define actualmente nuestra civilización. El concepto “red de comunicación” nos sirvió para enmarcar el debate: una red es un conjunto de nodos interconectados que procesan flujos de información; son estructuras muy dinámicas y flexibles; eso es Internet, claro, pero también es así nuestro cerebro, como alguien comentó… y no sólo nuestro cerebro, diría yo: en realidad las redes constituyen la estructura fundamental de la vida, de toda clase de vida… pero Internet es excepcional: es la herramienta de comunicación más potente entre seres humanos que nunca haya existido…

La extensión de Internet en los últimos 15 años ha sido exponencial, somos ya más de 1.400 millones de usuarios en los cinco continentes del planeta, y esto aún no ha terminado. La capacidad de comunicación que nos brinda Internet es formidable, nunca antes ha existido algo similar, esto es nuevo, radicalmente nuevo... Internet es una inmensa red de redes; cada un@ de nosotr@s somos nodos en distintas redes, en las que funcionamos de distintas maneras, en función de nuestros intereses en cada red; en las redes no todos los nodos son iguales: son más valiosos los que procesan más información, los que introducen nueva información en la red, los nodos creativos, los que marcan tendencia, los que funcionan como “enlaces” entre dos o más redes…

En las redes se entra y se sale con facilidad, se interconectan entre sí, funcionan en un presente continuo, nos permiten establecer comunicación simultánea con más de una persona… cada red se auto-organiza a su manera, el contexto es de completa libertad, porque así se concibió cuando se diseñó Internet, a finales de los años sesenta… Así es y así funciona nuestro mundo, es algo que debemos conocer y saber manejar conforme nuestros intereses; por ello es muy importante una reflexión personal acerca de en qué redes estar, y cómo estar, en función de los objetivos que vayamos marcándonos en cada momento… como tú bien enfatizaste. El debate se anima, y muy pronto sabemos que la gente más joven camina por estos senderos varios pasos por delante del resto… por sus intervenciones los conoceréis!

Adela nos explica que para ella estar en Internet es otra forma de estar en el mundo, tan cierta y real como estar físicamente, y también algunas preocupaciones… ¿estar en Facebook, Myspace o Twenty es estar vendida? ¿Hasta qué punto puedo controlar la difusión general de contenidos de información que vuelco en la red bajo supuestas garantías de privacidad? ¿Existe “privacidad” en Internet…?

Ángel nos habla de su “miedo enigmático”, de cautela, precaución… mummmm ¿Internet libre? ¿Alguien, quien sea, no debería controlar un poco todo esto?... Manuel nos hace ver la diferencia entre el “miedo” y el “respeto”, y también el carácter casi “mágico” de la red… ¿Cómo se construye nuestro perfil en la red…? ¿Qué cantidad de información volcamos nosotr@s mism@s, y qué información y conclusiones saca el sistema, a partir de cosas tan triviales como nuestras búsquedas, las páginas que visitamos, las redes en las que estamos…? Y todo esto, ¿alguien lo utiliza para algo…?

Un pequeño resquemor flota en el ambiente de la sala, pero Esperanza, sentada en el otro extremo de la mesa, enseguida nos devuelve la luz de la mirada y la experiencia vital de la gente joven: ¡fuera miedos!, nos dice entusiasmada; ¡aprendamos de los jóvenes!, porque ellos son los que realmente están sabiendo extraer los grandes beneficios de Internet y de las redes sociales!!!: Su enorme capacidad para establecer lazos, para comunicar, expresar, compartir! … realidad y tiempo virtual, y realidad y tiempo real, expansión de los límites, del conocimiento, conexión… ¡Eso es Internet!...

Y enseguida Concha nos comenta que va teniendo cada vez menos miedo, que sabe que tenemos que estar en Internet… y por fin le toca el turno a Miriam, navegante infatigable por los mundos virtuales, investigadora curiosa del porqué y el para qué de sus infinitas criaturas … ¡desterrad los miedos! ¡Fuera la ignorancia! ¡Conoced!, y ¡mucho ojo: nada es 100% privado en Internet!, nos advierte Miriam, antes de abandonar la sala para seguir con sus clases de Bachillerato…

Claro que debemos conocer!, porque la libertad y la responsabilidad son hijas predilectas del conocimiento...! ¿Verdad? ... María José nos comenta cómo Internet ya pone o quita Presidentes en los Estados Unidos, la necesidad de estar preparad@s para gestionar la ingente cantidad de posibilidades que nos brinda esta tecnología… todo ha sucedido tan rápido… ¿estamos formándonos para afrontar este nuevo modelo de civilización? Y la educación, el mundo de la escuela, ¿está respondiendo eficazmente al desafío?

E inmediatamente, y a propósito de la conexión, Carmen nos pone sobre otra pista importante: conexión íntima / meditación / conexión con el otro / Internet… ¡Casi nada!: Conectar con Nosotr@s Mism@s a través de la meditación - conectarnos con Otr@s a través de Internet... Pero claro, es que Carmen practica yoga – me aclaras - y utiliza Internet habitualmente en su día a día… esta pista tiene su miga, ¿verdad? Porque también enlaza con lo que habíamos visto al iniciar la tertulia, la necesidad de reflexionar acerca de en qué redes estar, y cómo estar, en función de los intereses que tengamos en cada momento… de lo que nos vaya diciendo nuestro Yo interior… Y la reflexión sobre los niños, qué utilizar de Internet, cómo utilizar Internet… que yo diría que l@s niñ@s tienen mucho más clara que nosotr@s...

Por fin Mar ya no puede seguir callada más tiempo, y mirando el reloj de reojo, porque pronto tendrá que abandonar la tertulia para impartir sus clases de historia, nos dice que a ella le dan el disgusto de su vida si nos quitan Internet… de modo que ojo y al loro!!!, que esto es muy valioso y tenemos que defenderlo… si algún día hiciera falta … y hablando de lo “valioso”, nos recuerda que al final “no nos podemos escapar de los valores”, porque son nuestros valores los que ponemos a funcionar cuando ejercemos nuestra libertad, también en Internet, también en las redes sociales en las que participamos… y ojo con crearnos una “segunda película”, un “personaje virtual” que poco o nada se parezca a lo que somos en nuestra “vida real”: la red no es una puerta por la que escapar de nosotr@s mism@s, de nuestro entorno físico, de lo que hasta hace poco llamábamos “la vida real”, por más que estas fronteras cada día sean más y más difusas… ¡Autenticidad, fidelidad a nosotr@s mism@s, encuentro con lo que somos! nos recuerda Mar... que no es lo mismo que “ingenuidad” (como no es lo mismo “miedo” que “respeto”), gracias Manuel!!… y no te preocupes Mar, que con Internet Libre no van a terminar, ¡no!, sabiendo que tú estás ahí para que eso no suceda…, y sabiendo que también está Sergio, que no sabe de miedos, ni quiere saber, y Ana, que es capaz de iluminar la biblioteca entera y yo diría que todo el colegio con su sonrisa inmensa, y nos dice que si le quitan Internet le roban un trozo muy, muy importante de su vida… amistades, recuerdos, … y es que con la comunicación a través de Internet desbordamos los límites físicos de nuestro cuerpo y nuestro entorno, desbordamos el concepto lineal del tiempo, es como si fuéramos capaces de expandir nuestros sentidos a través de la red para abarcar la totalidad de cuanto existe sobre el planeta Tierra, … y pronto iremos incluso más allá de este planeta… porque somos gente curiosa, y gente comunicativa, es nuestra naturaleza, somos navegantes, ¿no es verdad, Miriam? ¿Verdad, Adela? Y tú, Ángel, ex-marino mercante, ¿cómo vas de miedo a esta altura de la tertulia? Mejor, ¿verdad? ¿Manuel? ¿Y tú, Rosa? …

Y gracias de nuevo: gracias María José por recordarnos la necesidad de mantener despierto - también en Internet - nuestro espíritu crítico… porque tampoco es oro todo lo que reluce en Internet, porque charlatanes, haberlos, haylos… Y gracias Concha por esa historia real como la vida misma entre tu amigo ya jubilado y esa jovencita de 22 años, qué bonito es el amor, aay…! Y tus niñ@s, esos locos bajitos de siete años que ya saben que son responsables y arquitectos de sus vidas… Y gracias Esperanza por ese broche de oro de la tertulia que fueron tus últimos comentarios... En fin Concha, una auténtica tertulia, de las de antes de Internet!!! Ja, ja, ja!! Un fuerte abrazo para tod@s, y gracias de nuevo por el rato fantástico que hemos echado junt@s!.

Sobre los encuentros con niños de corta edad (Profesoras tutoras de 2º de Educación Primaria)

Con estas palabras queremos valorar la experiencia que nuestra compañera, Concha Redondo, ha desarrollado en las aulas de segundo de educación primaria.

Comenzó presentándose como "profe" de alguna de nosotras, cosa que a muchos alumnos les llamó la atención, y continuó explicando que, aunque ahora se dedica a otras cosas y "clases", quería conocer la opinión de los niños de hoy. Charlar con ellos.

Expuso, con brevedad, los dos temas que se iban a tratar en el diálogo:

Respeto a nosotros porque somos seres únicos y, por tanto, a los demás porque son como nosotros. No estamos en la vida para pelearnos,sino para amarnos y ayudarnos,aunque amemos más a unos que a otros.

Podemos ser y somos los arquitectos de nuestra vida y construirla sin dejarnos influenciar por los demás. En todo caso, escuchando siempre y teniendo en cuenta la opinión de nuestros padres y las personas que nos quieren.

Su lenguaje fue claro y cercano a los niños y niñas; se mostró conocedora de la realidad y lenguaje actual de los alumnos y ellos la entendieron perfectamente. Puso ejemplos incluso de películas actuales. El encuentro fue muy participativo y la interacción con los alumnos fue constante.

Valoramos la actividad muy positivamente, los niños acabaron contentos y sintiéndose escuchados en sus opiniones, habían podido participar todos libremente. Nosotras quizás hubiéramos propuesto al final alguna actividad-evaluación por escrito, pretendiendo con ello asentar lo compartido.

Desde aquí damos las gracias a Concha por su disposición, preparación y ofrecimiento a realizar estas charlas en nuestras aulas. Esperamos que se repitan, no sólo nosotros sino nuestros niños y niñas.

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